miércoles, 21 de mayo de 2014


<< IL CARAVAGIO>> BACO.

La pintura representa a un joven dios Baco, reclinado a la manera clásica con uvas y hojas de parra en el pelo, manoseando el cordel de la floja toga que le cubre. Sobre una mesa de piedra enfrente de él hay un bol de fruta y una jarra grande de cristal con vino tinto; con su mano izquierda ofrece al espectador un cáliz o copa de vino llana y ancha, aparentemente invitando al espectador a unirse a él.
El vino se ha servido hace poco, como indican la espumilla en la jarra, mientras que Baco sostiene en la mano el cáliz con poca seguridad como muestran las vibraciones; las mejillas, como las manos, están sonrojadas y contrastan con la palidez de la piel, indicando un estado de ligera ebriedad.
Maurizio calvesi ha propuesto que se interprete éste y los otros cuadros de género alegórico-mitológico como las verdaderas y auténticas «Metamorfosis poéticas del tema sagrado», de acuerdo con la contemporánea concepción esotérico-religiosa. En este cuadro, la androginia del sujeto debe entenderse como unión de los contrarios y por lo tanto armonía, propia de lo divino, mientras que Baco, Dios muerto y resucitado, preanuncia simbólicamente la venida y el sacrificio de Cristo, que ofrece el cáliz de la salvación, como Baco que aquí ofrece el cáliz.
El uso de un espejo para ayudar al pintor mientras trabaja del natural elimina la necesidad de dibujo. De esta manera, lo que parece la mano izquierda del chico sería en realidad la derecha. El artista inglés David Hockney hizo de los métodos de trabajo de Caravaggio un rasgo central de su tesis (conocida como la tesis Hockney-Falco) que los artistas del Renacimiento y posteriores usaron alguna clase de cámara lúcida.
Debido a la sensual poesía de la realista pintura de Caravaggio, sería desacertado pensar en una caricatura o disfraz.1 No obstante, aunque no fuera esa la pretensión de Caravaggio, hay humor en esta pintura. El Baco sonrojado es un retrato adecuado de un adolescente medio borracho vestido con una sábana y apoyándose en un colchón en el palacio romano del cardenal, pero resulta menos convincente como dios grecorromano. No es Baco, sino un individuo ordinario disfrazado de Baco, el que mira al espectador, tedioso y despierto1 Las ondas en la superficie de su vino son mala señal: no será capaz de mantener la pose durante mucho más tiempo, y más vale que el artista se dé prisa y acabe de pintar la mano izquierda.

Columnata de San Pedro


 Esta obra pertenece al conjunto arquitectónico de San Pedro del Vaticano, residencia oficial de los Papas y de la Curia romana. La visión frontal la acapara la enorme cúpula de Miguel Angel, de 131 metros de altura, obra capital del Renacimiento italiano. Sin embargo, y aún siendo importante la iglesia de San Pedro queda casi olvidada detrás de la impresionante plaza y fachada barroca.
Olvidada ya la primitiva concepción de Bramante de dotar a la Basílica de cuatro fachadas iguales sobre planta de cruz griega, se opta por alargar la nave central y cerrar la obra con la fachada de Maderna. Este conjunto se construyó en el XVII, siglo que en Europa tuvo lugar el cisma luterano y algunos Estados establecieron para su gobierno un sistema político de monarquía absoluta. A esta época corresponde el alargamiento de la nave central de la Basílica, y la amplia fachada, cuya obra corresponde al arquitecto barroco Carlo Maderno.



     La citada fachada de San Pedro del Vaticano presenta unas gigantescas columnas de fuste liso, decoradas con capiteles corintios que sostienen un frontón triangular con un relieve del escudo del Vaticano. Sobre la nave de la fachada principal aparece además un cuerpo de ventanas rematado por una balaustrada en la que se sitúan las efigies de los doce Apóstoles. A la puerta principal del Vaticano se accede por una amplia escalinata que pone en contacto la Basílica con la Plaza de San Pedro.

La Columnata de la Plaza es obra del gran arquitecto barroco Gian Lorenzo Bernini. Constituida por dos inmensas alas de cuatro series de columnas de cada, que se abren en una elipsis, restando un magnífico efecto a la fachada de San Pedro. 

     Bernini toma como punto de partida el eje central, alargado después de las últimas reformas, y sobre él diseña una de las más impresionantes plazas de Occidente. Así pues, la Plaza de San Pedro del Vaticano es un espacio abierto de forma ovalada, o más bien, circular prolongado, porque está formado por dos arcos de círculo cuyos centros están separados por un espacio de 50 metros.
En cada uno de los lados dos fuentes completan el conjunto. En medio de la plaza se levanta el antiguo obelisco egipcio del circo de Nerón. La Plaza está rodeada de cuatro hileras de columnas toscanas, coronadas por un entablamento liso que sostiene una balaustrada, decorada en su parte superior con 140 esculturas que representan a santos y padres de la Iglesia. Este conjunto arquitectónico simboliza los brazos de la Iglesia que acogen a todos los católicos y a su vez magnífica la figura del Papa como representante de Dios en la Tierra.


     El efecto de este deambulatorio formado por 296 columnas es impresionante, ya que da la sensación de no acabarse, efecto que nos pone de manifiesto un nuevo concepto de espacio dirigido hacia el infinito. Bernini quiebra el ideal de perspectiva central que había presidido la arquitectura de Brunelleschi.



La Plaza y Columnata de San Pedro es una de las más importantes manifestaciones del Barroco porque con su planta oval y sus planteamientos complejos y movidos se aleja de la simplicidad del Renacimiento. La luz adquiere un nuevo papel en la percepción total del edificio posibilitando la búsqueda del efecto y disolviendo las formas arquitectónicas. El conjunto, con el alargamiento del eje axial, que supera la dimensión de la propia Basílica, va a ser un modelo a imitar en todas las construcciones barrocas de la época. El sentido de lo colosal y el tratamiento escultórico de la decoración, propias de Bernini, van a seguirse en toda Europa.


http://historiarte-bach.blogspot.com.es/2013/03/columnata-de-san-pedro.html

ENRIQUE IV DE FRANCIA RECIBIENDO DE JUPITER Y JUNO EL RETRATO DE MARIA DE MEDICI

Este lienzo formaba parte de la serie encargada a Rubens por la reina madre de Francia, María de Medicis, para decorar el salón principal del Palacio del Luxemburgo en París. Con esa serie se pretendía exaltar y glorificar la vida y la regencia de la soberana.El matrimonio de Enrique IV de Francia y María de Medicis formaba parte de los habituales enlaces de Estado, en los que los contrayentes no se conocían. María era hija del gran duque de Toscana y tenía 25 años mientras que Enrique, divorciado sin hijos de Margarita de Valois, esperaba una unión fecunda y más lucrativa que la anterior. Sería la riqueza de la dote y no la belleza de la joven lo que animó al monarca francés a contraer matrimonio.Esta escena es la cuarta del ciclo y en ella Rubens imagina un primer encuentro entre los futuros esposos a través del arte. Enrique IV recibe el retrato de su prometida de manos de Himeneo -dios del matrimonio, en la izquierda- y Cupido -dios del amor, en la derecha-. Galia, la personificación de Francia, ataviada con un casco emplumado y un vestido adornado con flores de lis, aconseja adecuadamente al monarca mientras que en la zona superior de la composición se halla la pareja olímpica, Júpiter y Juno, acompañados cada uno por sus símbolos: el águila con los rayos del dios y el carro y los pavos reales de la diosa. La presencia de los dioses es una referencia a los "alter ego" divinos de Enrique y María, simbolizando la armonía conyugal.Las figuras se ubican ante un fondo de paisaje en el que observamos una columna de humo como referencia a la reciente guerra de Saboya, hecho por el que el monarca aparece con armadura y portando el cetro y la banda de general. Con su casco y escudo juegan dos amorcillos a sus pies. El objetivo del matrimonio será convertir a un monarca belicoso en un rey amante de la paz, lo que provocará la prosperidad y el desarrollo de las artes en el reino, en la línea que se aprecia en las escenas de la Regencia. La política defendida por la propia María estaría vinculada con esta filosofía que defendía la paz y potenciaba la diplomacia por vía matrimonial. No en balde, este ciclo estuvo finalizado con motivo del enlace de la princesa Enriqueta María con el futuro Carlos I de Inglaterra. La Educación de María de Medicis y el Triunfo de María de Medicis en Juliers también forman parte de la serie.
Este lienzo formaba parte de la serie encargada a Rubens por la reina madre de Francia, María de Medicis, para decorar el salón principal del Palacio del Luxemburgo en París. Con esa serie se pretendía exaltar y glorificar la vida y la regencia de la soberana.El matrimonio de Enrique IV de Francia y María de Medicis formaba parte de los habituales enlaces de Estado, en los que los contrayentes no se conocían. María era hija del gran duque de Toscana y tenía 25 años mientras que Enrique, divorciado sin hijos de Margarita de Valois, esperaba una unión fecunda y más lucrativa que la anterior. Sería la riqueza de la dote y no la belleza de la joven lo que animó al monarca francés a contraer matrimonio.Esta escena es la cuarta del ciclo y en ella Rubens imagina un primer encuentro entre los futuros esposos a través del arte. Enrique IV recibe el retrato de su prometida de manos de Himeneo -dios del matrimonio, en la izquierda- y Cupido -dios del amor, en la derecha-. Galia, la personificación de Francia, ataviada con un casco emplumado y un vestido adornado con flores de lis, aconseja adecuadamente al monarca mientras que en la zona superior de la composición se halla la pareja olímpica, Júpiter y Juno, acompañados cada uno por sus símbolos: el águila con los rayos del dios y el carro y los pavos reales de la diosa. La presencia de los dioses es una referencia a los "alter ego" divinos de Enrique y María, simbolizando la armonía conyugal.Las figuras se ubican ante un fondo de paisaje en el que observamos una columna de humo como referencia a la reciente guerra de Saboya, hecho por el que el monarca aparece con armadura y portando el cetro y la banda de general. Con su casco y escudo juegan dos amorcillos a sus pies. El objetivo del matrimonio será convertir a un monarca belicoso en un rey amante de la paz, lo que provocará la prosperidad y el desarrollo de las artes en el reino, en la línea que se aprecia en las escenas de la Regencia. La política defendida por la propia María estaría vinculada con esta filosofía que defendía la paz y potenciaba la diplomacia por vía matrimonial. No en balde, este ciclo estuvo finalizado con motivo del enlace de la princesa Enriqueta María con el futuro Carlos I de Inglaterra. La Educación de María de Medicis y el Triunfo de María de Medicis en Juliers también forman parte de la serie.
Este lienzo formaba parte de la serie encargada a Rubens por la reina madre de Francia, María de Medicis, para decorar el salón principal del Palacio del Luxemburgo en París. Con esa serie se pretendía exaltar y glorificar la vida y la regencia de la soberana.El matrimonio de Enrique IV de Francia y María de Medicis formaba parte de los habituales enlaces de Estado, en los que los contrayentes no se conocían. María era hija del gran duque de Toscana y tenía 25 años mientras que Enrique, divorciado sin hijos de Margarita de Valois, esperaba una unión fecunda y más lucrativa que la anterior. Sería la riqueza de la dote y no la belleza de la joven lo que animó al monarca francés a contraer matrimonio.Esta escena es la cuarta del ciclo y en ella Rubens imagina un primer encuentro entre los futuros esposos a través del arte. Enrique IV recibe el retrato de su prometida de manos de Himeneo -dios del matrimonio, en la izquierda- y Cupido -dios del amor, en la derecha-. Galia, la personificación de Francia, ataviada con un casco emplumado y un vestido adornado con flores de lis, aconseja adecuadamente al monarca mientras que en la zona superior de la composición se halla la pareja olímpica, Júpiter y Juno, acompañados cada uno por sus símbolos: el águila con los rayos del dios y el carro y los pavos reales de la diosa. La presencia de los dioses es una referencia a los "alter ego" divinos de Enrique y María, simbolizando la armonía conyugal.Las figuras se ubican ante un fondo de paisaje en el que observamos una columna de humo como referencia a la reciente guerra de Saboya, hecho por el que el monarca aparece con armadura y portando el cetro y la banda de general. Con su casco y escudo juegan dos amorcillos a sus pies. El objetivo del matrimonio será convertir a un monarca belicoso en un rey amante de la paz, lo que provocará la prosperidad y el desarrollo de las artes en el reino, en la línea que se aprecia en las escenas de la Regencia. La política defendida por la propia María estaría vinculada con esta filosofía que defendía la paz y potenciaba la diplomacia por vía matrimonial. No en balde, este ciclo estuvo finalizado con motivo del enlace de la princesa Enriqueta María con el futuro Carlos I de Inglaterra. La Educación de María de Medicis y el Triunfo de María de Medicis en Juliers también forman parte de la serie.

EXTASIS DE SANTA TERESA

La obra del escultor y pintor Gian Lorenzo Bernini. Fue realizada entre 1647 y 1651, por encargo del cardenal Cornaro, para ser colocada donde iría su tumba, en la iglesia de Santa María de la Victoria (Santa Maria della Vittoria), en Roma, donde actualmente se encuentra, en la llamada Capilla Cornaro. Está considerada una de las obras maestras de la escultura del alto barroco romano.
Todo el conjunto fue supervisado y completado por un maduro Bernini durante el papado de Inocencio X. Durante este tiempo, la implicación pasada del escultor con los gastos derrochadores del previo papado Barberini había hecho que Bernini cayera en desgracia y se le privó en gran medida del mecenazgo papal. Bernini estaba por lo tanto disponible para el veneciano Cardenal Federico Cornaro (1579-1673), que había elegido la iglesia, por otro lado sin mayor atractivo, de los Carmelitas descalzos como su capilla de enterramiento. Tenía razones para evitar que lo enterrasen en Venecia, puesto que su nombramiento como cardenal por Urbano VIII (Barberini) mientras su padre Giovanni era dogo había creado cierto escándalo en su ciudad natal, con enfrentamientos dentro de las familias. Eligió una capilla que previamente había presentado a San Pablo en éxtasis, y el cardenal lo remplazó con una imagen de la primera santa carmelita en éxtasis, cuya canonización era reciente (1622).[1]
Se completó en 1652 costando la por entonces exorbitante suma de 12.000 escudos (unos 120,000 dólares).[2]
Representa a Santa Teresa de Jesús, escritora mística y reformadora de la sociedad religiosa, que fue beatificada en el año 1614 por Paulo V (canonizada en 1622).
La capilla es una explosión de mármol de color, metal y detalles. Filtros de luz a través de una ventana por encima de santa teresa, subrayados por rayos dorados. La cúpula tiene frescos con un cielo de trampantojo, lleno de querubines, con la luz descendente del Espíritu Santo representado en forma de paloma. En las paredes laterales, hay relieves a tamaño real de la familia Cornaro.
Las dos figuras principales que centran la atención derivan de un episodio descrito por santa Teresa de Ávila en uno de sus escritos, en el que la santa cuenta cómo un ángel le atraviesa el corazón con un dardo de oro. La escena recoge el momento en el que el ángel saca la flecha, y la expresión del rostro muestra los sentimientos de Santa Teresa, mezcla de dolor y placer. Según sus propias palabras:
"Veíale en las manos un dardo de oro largo, y al fin del hierro me parecía tener un poco de fuego. Este me parecía meter por el corazón algunas veces, y que me llegaba a las entrañas. Al sacarle, me parecía las llevaba consigo, y me dejaba toda abrasada en amor grande de Dios. El dolor era tan fuerte que me hacia lanzar gemidos, mas esta pena excesiva estaba tan sobrepasada por la dulzura que no deseaba que terminara. El alma no se contenta ahora con nada menos que con Dios. El dolor no es corporal sino espiritual, aunque el cuerpo tiene su parte en él. Es un intercambio amoroso tan dulce el que ahora tiene lugar entre el alma y Dios, que le pido a Dios en su bondad que haga experimentarlo a cualquiera que pueda pensar que miento... "
Las figuras están realizadas en mármol blanco principalmente, y los rayos del sol de bronce. Tiene una altura de 3,5 metros. La fuerte expresividad de la obra, el desorden de las figuras y en especial del pliegue del manto de la santa, denotan que es de claro estilo barroco. Bernini además pintó la capilla donde fue colocado el conjunto, para darle mayor realismo y sensación de misticismo.

 File:Estasi di Santa Teresa.jpg
La expresión de la santa en plena transverberación, constituye una de las más grandes realizaciones de todo el arte barroco. La postura del cuerpo y la expresión facial de santa Teresa ha hecho que algunos atribuyan su experiencia a un momento climácico. Otros atribuyen que la expresión cuadra con el intenso dolor que la santa describe cuando relata la transverberación. Bernini expresa con acierto el intenso dolor físico en la expresión facial que según la santa, se unía a un estado de alegría divina.
Esta capilla escenográfica unifica los temas de toda una vida tratados por Bernini, fiel al sentimiento barroco. La unidad de arquitectura, teatro, y escultura que se encuentra en este complejo es también un rasgo barroco, con el Espíritu Santo como un baño de luz o guiado por los rayos dorados que enmarcan la estatua y provienen de las ventanas en la parte superior de la capilla, lo que permite al cielo entrar en la iglesia.
Los efectos son teatrales, incluyendo el discurso que la santa sugiere flanqueada por el linaje de los Cornaro. Para añadirle dinamismo, Bernini ha trabajado la piedra en olas de tela, evocando el terremoto espiritual que rodea a Teresa. Un viento divino agita la ropa del ángel. Éste sonríe casi travieso. La nube sin pulir parece casi superflua; la ropa de Teresa parece que la basta en su levitación. "Un efecto luminoso hace que las imágenes parezcan suspendidas en el aire ".

Autorretrato de Rubens con su esposa





Estamos ante una obra de arte pictórico, posiblemente del arte barroco, cuyo autor es Rubens.Autorretrato con Isabella Brandt  es un cuadro del pintor flamenco Rubens realizado mediante la técnica pictórica del óleo sobre lienzo y tiene unas dimensiones de 1,78 metros  de alto por 1,36 metros de ancho. 
  En esta obra Rubens se autorretratará con su primera esposa, Isabella Brandt  hija de un noble de Amberes. Esta datada en 1609 durante el primer año de matrimonio y pone de manifiesto el bienestar de la pareja. Rubens e Isabella se casaron el 3 de octubre de 1609, en la Abadía de San Miguel de Amberes.   En el año en que realizó este cuadro, 1609, el pintor fue contratado como pintor de la corte del archiduque Alberto y su esposa, gobernadores españoles en los Países Bajos.   En el cuadro aparecen referencias al amor como la planta de madreselva que se halla en frente de la pareja y que simbolizaba la fidelidad. Sus manos derechas aparecen unidas e indican que están casados. La pintura es un retrato doble a tamaño casi natural de ambas figuras en el que se cuida al máximo el detalle de las calidades de las telas y de todos los objetos representados.   El cuadro va a  poner de manifiesto la influencia de la pintura veneciana, y en concreto de la pintura de Tiziano. Las influencia del artista italiano podrá verse en el colorido intenso de los ropajes (las medias de Rubens) y en el lujoso tratamiento de las telas.   Esta representación detallada de las telas y las cualidades de los vestidos se traduce en su intención de alardear de la riqueza material que poseía. La luz es un elemento importante en la composición. Este cuadro tiene una luz dorada, que recuerda al otoño, y va a caer principalmente en los rostros del matrimonio.   
                                                                                     
LA MUERTE DE LA VIRGEN  DE IL CARAVAGGIO (1606)
Estamos ante una obra pictórica que pertenece a la pintura barroca italiana. Nuestra obra la realizo Michelangelo Merisi, más conocido como "il Caravaggio". Esta obra pictórica se denomina La muerte de la Vrigen. esta obra se ve claramente que es un óleo sobre lienzo.
La obra de il Caravaggio  mide 369 cm de largo y 245 cm de ancho, nuestra obrea se encuentra em el museo de Louvre (París). La muerte de la Virgen pertenece a la etapa que il caravaggio comienza su estlo maduro y comienza a aplicar a sus obras el tenebrismo caravaggiesco. Esta obra pictórica no tuvo mucha suerte porque fue retirada de la iglesia Scala, porque decian que imitaba con demasiada exactitud el cádaver hinchado de una prostituta ahogada en el Tíber.
La descripcion de la Virgen en su lecho de muerte , un catre, aparece con una vestimenta roja, los pies descalzos, el pelo alborotado, sus manos inertes, el cuerpo hinchado y una finísima aureola divina sobre su cabeza. Junto a ella encontramos a María Magdalena, que desconsolada apoya su cabeza sobre las rodillas. A su lado vemos un cuenco metálico (palangana) con el que limpió el cuerpo de María. Los apóstoles descalzos, muestran diferentes actitudes frente a esa muerte, San Juan erguido reflexiona, otros lloran, secan sus lágrimas u ocultan sus ojos, como muestra de dolor.
Toda la escena se desarrolla en una estancia rara, oscura,de su techo cae un telón rojo.
Los elementos que la crean la obra son: Rayo de luz. Surge desde una ventana situada en la parte superior izquierda y llega hasta el rostro de María, los apóstoles dispuestos en escala, el cortinaje.
El color de nuestra obra es Predominio del rojo (muerte, pasión-dolor-), cálidos en María Magdalena, ropajes de apóstoles. Se quiere resaltar el sentimiento. La luz en nuestra obra se utiliza el claroscuro muy acentuado. Dando lugar al tenebrismo. Ilumina bruscamente aquello que desea mostrar, poniendo en oscuridad el resto de la escena.
Aqui teneis un video con información muy provechosa sobre la obra de il Caravaggio, ¡disfrutarla!

Lección de anatomía del doctor Nicolaes Tulp.

Estamos ante una obra pictórica, posiblemente perteneciente.
La obra es llamada la Lección de anatomia del doctor Nicolaes Tulp y es realizada por un importante pintor holandés llamado Rembrandt.
En cuanto a la descripción de la obra pictórica podemos observar a siete asistentes  mirando atentos la lección de anatomia de Nicolaes Tulp. En la imagen, el doctor, está en el momento donde pinza un haz muscular del brazo del cadaver.
La obra tiene claroscuro, ya que los siete asistentes, el cadaver y el doctor se bañan de iluminación, mientras el fondo negro simula la penumbra. En cuanto al contexto, Rembrandt nació en Leyden en 1606 y murió en Amsterdam en 1669, fue el gran intérpetre de la sociedad burguesa holandesa y el primer artista que vende sus productos en el mercado sin depender de la corte. Sus principios fueron modestos y humildes, Pieter lastman le enseña el tenebrismo caravaggiesco, más adelante, Rembrandt abrirá un taller, donde desarrollará la técnica del grabado del aguafuerte. Además de la lección de anatomia del doctor Nicolaes Tulp, también elaborará importantes obras pictóricas como su autorretrato a la edad de 60 años con óleo sobre lienzo, su ronda de noche, que será de las obras más importantes del autor, que fue sometido a dos limpiezas y con ello se consiguió ver que el capitán Banning Cocq, su lugarteniente y la compañía militar salen con estandarte y música por la puerta de la ciudad a plena luz del sol. Otra obra importante será los síndicos del gremio de pañeros, que será un retrato colectivo y por último Aristóteles contemplando el busto de Homero que también será óleo sobre lienzo.

SANT ANDREA AL QUIRINALE (1658-1670)
Estamos ante una obra arquitectónica que pertenece a la arquitectura barroca italiana. Su autor es Gian Lorenzo Bernini, Bernini se sentía especialmente satisfecho ante esta obra arquitectónica que se denomina Sant' Andrea al Quirinale. Es una iglesia de planta central, destinada a los novicios jesuitas, donde juegan con el elemento importante en esta modalidad que es la línea cóncava y convexa.
Esta situada en la colina del Quirinal. Fue construida entre los años 1658-1670. Se realizó esta obra arquitectónica por encargo de Camillo pamphili. Está considerada una de las obras maestras de la arquitectura de Bernini. Su hijo recordaba cómo, años después, Bernini solía sentarse en el interior a observar el juego de luces, los estucos teñidos y el mobiliario policromado.Controlando los efectos de dilatación, obliga a la mirada del espectador a seguir un recorrido en forma de órbita, según la dirección de las pilares y los entablamentos, que termina en la capilla mayor, la imagen escomo interrumpida  por  dos columnas de mármol  a cada lado, con el  San Andrés en vuelo, es decir como si esttuviera volando . La policroma de los mármoles, el oro y blanco de los estucos, la más brillante y uniforme de la linterna concentran la máxima intensidad lumínica en la capilla mayor que, frente a la oscuridad de las capillas laterales, con todo esto el  fin es concentrar la atención en la teatralidad del acontecimiento milagroso: la ascensión del Santo.

Podemos apreciar que la planta de Sant' Andrea Quirinale que la planta es de forma oval, con la puerta situada en el eje menor y precedida por una composición de forma encurvada, rompiendo el sentido longitudinal de este tipo de planta. Tiene luego otras cuatro capillas ubicadas a los lados de los ejes transversales. El interior se articula mediante pilastras y esta decorado con esculturas a sus alrededores, convirtiéndose la arquitectura en el marco en el que estas se desarrollan. Los materiales utilizados son ricos, utilizándose mármoles de colores y piedras.
Aqui tienes un minireportaje de el interior de la iglesia de Sant'Andrea al quirinale, ¡disfrutarlo!

La Buenaventura.

Estamos ante una obra pictórica, posiblemente perteneciente al arte barroco.
Esta obra pictórica es reconocida como la Buenaventura y la realizó un famoso pintor barroco conocido por el apodo de Il caravaggio.
En cuanto a la descripción de la obra, podemos ver que a la izquierda de la imagen aparece una gitana leyendole la mano a un joven con buena apariencia, mientras la gitana le lee la mano al joven le roba un anillo que lleva en la mano que le esta leyendo el futuro. La luz, también tendrá un factor importante en la obra, ya que un rayo de sol penetra y baña a los dos personajes dandole más importancia. Como podemos ver, la obra tiene un tema bantaste picaresco, ya que la gitana le roba un anillo al joven.
En cuanto al contexto, también destacan importantes obras de Il Caravaggio como son la vocación de San Mateo, donde cristo y san Pedro llaman a San Mateo y se sorprende señalándose con el dedo, también se le atribuye gran importancia a obras como La virgen de San Loreto o La muerte de la virgen, que serán muy criticadas, sobre todo la segunda mencionada, que será eliminada de la iglesia de la Scala porque la representación de la virgen será muy parecida a la de una prostituta ahogada en el Tíber.
Además, tendrá gran importancia en la época de la pintura barroca italiana otro autor como será Anibal Carracci, su hermano Agostino y su primo Ludovico, aunque Anibal será el que más destaque con la galería Farnesio.